La calidad del aire en el interior de los edificios de empresas y organizaciones tiene mucho que ver con la producción de efectos adversos para la salud de las personas como alergias estacionales, asma o sinusitis, entre otras muchas implicaciones para la salud.
En cuestión de bienestar y salud en el entorno corporativo, lo importante está en el aire que respiras y hay evidencias científicas que así lo corroboran.
Por eso hoy te contamos por qué elevar la calidad del aire mediante el saneamiento e higienización de sistemas de climatización y conductos de aire garantiza el confort ambiental en espacios interiores y promueve un entorno saludable para las personas.
Vamos a verlo.
Conoce los riesgos de la mala calidad del aire interior para la salud
La contaminación en el interior puede llegar a ser entre dos y cinco veces más alta que la del exterior según la EPA de Estados Unidos (Agencia de Protección Ambiental).
Además, pasamos más tiempo en espacios interiores como oficinas, escuelas y todo tipo de edificios, que en el exterior.
Por eso, se dispara el riesgo de sufrir molestias a causa de los alérgenos y otros contaminantes invisibles presentes en el aire, y como consecuencia directa, aumenta la dificultad para respirar, el cansancio o la somnolencia, disminuye el confort y también la productividad en el ejercicio de las actividades laborales.
El resultado para la salud toma forma a través de múltiples síntomas físicos:
- Alergias
- Estornudos
- Sequedad de garganta
- Dolores de cabeza
- Somnolencia
- Falta de concentración
- Presión en el pecho
- Dificultad para respirar
- Irritación de los ojos
- Congestión nasal
- Tos seca
- Picazón y sequedad de la piel
- Mareos
- Náuseas
Una exposición más o menos prolongada a las partículas contaminantes del aire y de baja calidad se traduce en efectos adversos para las personas, especialmente en el caso de las más vulnerables por su edad, estilo de vida, edad, disposición genética o por la presencia de enfermedades previas.
Evita los factores que afectan a la calidad ambiental interior
La acumulación de material orgánico, hongos, polvo y otro tipo de residuos en los sistemas de climatización, ventilación y conductos de aire tiene solución.
El estudio y valoración de ambientes interiores en instalaciones con presencia de personas y las pruebas para medir la calidad del aire interior realizadas por profesionales, te indican a qué contaminantes específicos te estás enfrentando y cuáles son las medidas idóneas que es preciso adoptar.
¿Cómo lo hacemos?
- Analizamos las partículas en suspensión mediante gavimetría.
- Determinamos los factores implicados en la CAI (Calidad del Aire Interior).
- Llevamos a cabo el contaje de partículas, microbiología del aire respirable y parámetros químicos.
- Planificamos la auditoría de AENOR para la certificación de la CAI.
- Realizamos una valoración higiénica de las instalaciones.
- Hacemos un análisis de los parámetros químicos, físicos y de control.
- Localizamos los campos electromagnéticos y electroestáticos.
- Elaboramos un informe técnico que incluye acciones correctoras.
- Procedemos a emitir un certificado con declaración de conformidad.
- Establecemos un plan anual de mantenimiento higiénico según la normativa vigente.
Haz una limpieza regular de los conductos de aire acondicionado
Las soluciones adaptadas para la limpieza de conductos de aire acondicionado son una solución eficaz para equilibrar la concentración de agentes contaminantes que se acceden al flujo de aire, son absorbidos por los sistemas de climatización y producen una excesiva recirculación de aire.
El saneamiento e higienización completa de los sistemas de climatización, UTA (Unidad de Tratamiento de Aire) y climatizadores, cuida de la calidad del aire que las personas respiran.
Elimina microorganismos, polvo, depósitos de suciedad y todo tipo de partículas contaminantes presentes en los sistemas de climatización o ventilación, facilita la respiración y protege la salud de las personas que padecen alergias, asma y otros problemas respiratorios.
La lista de beneficios es interminable…
- Mejora la calidad del aire
- Mantén en buen estado higiénico los sistemas de climatización.
- Suprime la presencia de alérgenos, bacterias tóxicas y otros contaminantes.
- Promueve un entorno saludable.
- Incrementa la eficiencia energética.
- Elimina los malos olores.
- Eleva la vida útil de los sistemas de climatización.
- Disminuye el absentismo laboral.
- Impulsa la productividad.
- Brinda un rendimiento rentable a lo largo del tiempo.
Mantén el aire limpio. Por ti, por todos.
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